El aspecto de la “falta de presencia de los padres” cuando las madres negras jóvenes se sientan en la mesa de la cocina del Hospital de Niños Mondrian en Filadelfia puede haber provocado una acumulación de problemas de salud a largo plazo para las madres jóvenes, sugiere una investigación reciente.
El estudio multigeneracional involucró a 137 madres jóvenes de centros de maternidad y 264 madres negras jóvenes. Durante un promedio de casi dos décadas, el 18!23% de las madres estuvieron ausentes o nunca se casaron, y solo el 6% informó que se sentían equilibradas entre el trabajo, el hogar y los hijos. Solo el 39% de las madres negras experimentaron problemas de salud mental emocionalmente contundentes a pesar de los altos ingresos.
“Descubrimos que estos problemas de salud mental materna nos motivaron principalmente a asegurarnos de que hubiera una presencia de los padres en la mesa del Mondrian. Desafortunadamente, la falta de esta presencia se asoció con una mayor probabilidad de adversidad en la primera infancia, incluido el abuso físico y la negligencia, el asma, la dificultad para respirar y la hipertensión”, dijo Robert C. Richardson, pediatra en medicina familiar en Mondrian Children’s y autor principal del estudio.
En 2011, el Instituto para la Investigación y el Cuidado de las Mujeres Afroamericanas (IRANHAW) lanzó un sistema de vales útiles, que rápidamente sirvió como un recurso para las madres afroamericanas de bajos ingresos. El cupón da derecho a las mujeres a recibir atención médica, incluido el tratamiento en el hogar, las recetas de control de la natalidad y las evaluaciones digestivas y psiquiátricas.
En un esfuerzo por ayudar a las madres negras jóvenes, Mondrian duplicó su proporción hogar/departamento de trabajo al proporcionar dos turnos completos para ayudar a las madres con necesidades a largo plazo. Unas 1,600 de las madres del centro en este estudio eran bebés, en comparación con 1,300 de las madres negras. Así que el efecto del aumento en sus minutos de trabajo probablemente se vinculó con la presencia de un padre, dijeron los investigadores.
“Si bien una medida del contexto de la crianza (el papel de los padres en las necesidades de los niños) no surgió de nuestro análisis, probablemente explicó el hecho de que hay mucho más por hacer para las madres jóvenes vulnerables”, dijo la autora principal del estudio, la Dra.